COMO
CRISTIANOS VERDADEROS NECESITAMOS UN CAMBIO DE PERSPECTIVA.
¿POR QUÉ UN
CAMBIO DE PERSPECTIVA
Mientras
Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad
entregada a la idolatría. —Hechos 17:16
Mi esposa es
madrugadora; le encanta la tranquilidad que hay antes de empezar las
actividades en la casa, y usa ese momento para leer la Biblia y orar. Hace
poco, se instaló en su silla favorita, pero se encontró con un sillón bastante
desordenado que «alguien» había dejado así la noche anterior, tras mirar un
partido de fútbol por televisión. Al principio, el desorden la distrajo, y su
frustración conmigo le interrumpió la calidez del momento.
Entonces, se
le ocurrió algo: se cambió al sofá. Desde allí, podía mirar por la ventana
mientras el sol se levantaba sobre el Océano Atlántico. La belleza de la escena
que Dios estaba pintando esa mañana le cambió la perspectiva.
Mientras me
contaba la historia, ambos reconocimos la lección de aquella mañana. Aunque no
siempre podemos controlar las cosas de la vida que afectan nuestro día, sí
tenemos la posibilidad de elegir: o seguir dando vueltas en el «desorden» o
cambiar de perspectiva. Cuando Pablo estaba en Atenas, «su espíritu se
enardecía viendo la ciudad entregada a la idolatría» (Hechos 17:16). Sin
embargo, cuando cambió su perspectiva, usó el interés de los atenienses en la
religión como una oportunidad para proclamar al Dios verdadero: Jesucristo (vv.
22-23).
Cuando mi
esposa salió para ir a trabajar, fue el momento para que otra persona cambiara
de perspectiva: le pedí al Señor que me ayudara a ver mi desorden a través de
los ojos de ella y de los de Él.
Recuerda: La
sabiduría verdadera es ver las cosas desde la perspectiva de Dios.
LOS
BENEFICIOS QUE SE OBTIENEN CUANDO HAY UNA CORRECTA PERSPECTIVA DE DIOS.
1. Tener una
perspectiva correcta de Dios nos ayuda a comprender cuán grande es Su amor (Ef.
3: 17-18). 3:17 para que
habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y
cimentados en amor, 3:18 seáis plenamente capaces de comprender con todos los
santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, 3:19 y de conocer el amor de Cristo,
que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de
Dios.
2. Tener una perspectiva correcta de Dios nos
ayuda ver nuestra debilidad y a depender de Dios (Jn. 15:5- 7). Yo soy la vid,
vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho
fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
15:6 El que
en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen,
y los echan en el fuego, y arden.
15:7 Si
permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que
queréis, y os será hecho.
3. Tener una perspectiva correcta de Dios nos
ayuda a comprender Su Santidad y que debemos ser santos (Lv. 20:7- 8). 20:7 Santificaos, pues, y sed santos,
porque yo Jehová soy vuestro Dios.
20:8 Y
guardad mis estatutos, y ponedlos por obra. Yo Jehová que os santifico.
- 1 P. 1: 14-16). 1:14 como hijos obedientes, no os
conforméis a los deseos que antes teníais estando en vuestra ignorancia;
1:15 sino,
como aquel que os llamó es santo, sed también vosotros santos en toda vuestra
manera de vivir;
1:16 porque
escrito está: Sed santos, porque yo soy santo.
4. Tener una
perspectiva correcta de Dios nos ayuda a resistir la tentación. (Pr. 14:12).
Hay camino que al hombre le
parece derecho;
Pero su fin
es camino de muerte.
5. Tener una
perspectiva correcta de Dios nos ayuda enfrentar las pruebas con gozo y no
quitar los ojos de Dios (Ro. 8:28). Y sabemos que a los que aman a Dios, todas
las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son
llamados.
Stg. 1:2- 4.
1:2 Hermanos míos, tened por
sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas,
1:3 sabiendo
que la prueba de vuestra fe produce paciencia.
1:4 Más
tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos y cabales, sin
que os falte cosa alguna.
(He. 12:2). Puestos
los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto
delante de él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la
diestra del trono de Dios.
6. Tener una perspectiva correcta de Dios nos
ayuda nos protege del error doctrinal (Lc. 21:7-9). 21:7 Y le preguntaron, diciendo:
Maestro, ¿cuándo será esto? ¿Y qué señal habrá cuando estas cosas estén para
suceder?
21:8 El
entonces dijo: Mirad que no seáis engañados; porque vendrán muchos en mi
nombre, diciendo: Yo soy el Cristo, y: El tiempo está cerca. Más no vayáis en
pos de ellos.
21:9 Y
cuando oigáis de guerras y de sediciones, no os alarméis; porque es necesario
que estas cosas acontezcan primero; pero el fin no será inmediatamente.
(Ef. 4:1- 14). 4:1 Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis
como es digno de la vocación con que fuisteis llamados,
4:2 con toda
humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en
amor,
4:3
solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;
4:4 un
cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de
vuestra vocación;
4:5 un
Señor, una fe, un bautismo,
4:6 un Dios
y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos.
4:7 Pero a
cada uno de nosotros fue dado la gracia conforme a la medida del don de Cristo.
4:8 Por lo
cual dice:
Subiendo a
lo alto, llevó cautiva la cautividad,
Y dio dones
a los hombres.
4:9 Y eso de
que subió, ¿qué es, sino que también había descendido primero a las partes más
bajas de la tierra?
4:10 El que
descendió, es el mismo que también subió por encima de todos los cielos para
llenarlo todo.
4:11 Y él
mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas; a
otros, pastores y maestros,
4:12 a fin
de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación
del cuerpo de Cristo,
4:13 hasta
que todos lleguemos a la unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a
un varón perfecto, a la medida de la estatura de la plenitud de Cristo;
4:14 para
que ya no seamos niños fluctuantes, llevados por doquiera de todo viento de
doctrina, por estratagema de hombres que para engañar emplean con astucia las
artimañas del error,
4:15 sino
que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza,
esto es, Cristo,