miércoles, 6 de junio de 2018

JESUCRISTO ES NUESTRA “PROPICIACIÓN”.


JESUCRISTO ES NUESTRA “PROPICIACIÓN”.
“Todos nosotros nos descarriamos como ovejas, cada cual se apartó por su camino; más Jehová cargó en Él el pecado de todos nosotros” (Isaías 53:6).
Jesús sufrió como usted sufrirá. Pero Él sufrió mucho más que eso porque tomó no solo el sufrimiento suyo, sino llevó sobre Sí el sufrimiento de todo el mundo. Los pecados del mundo fueron comprimidos y destilados sobre el Señor Jesucristo. Los eruditos hebreos nos dicen que hay un plural intensivo en Isaías 53 que habla de la muerte de Cristo. Indican que literalmente significa que Jesús murió mil muertes. ¿Sabe lo que eso significa? Quiere decir que Jesús, siendo infinito, sufrió por una cantidad finita de tiempo, lo que usted, siendo finito, sufriría por una cantidad infinita de tiempo. Él sufrió en la cruz una eternidad infernal por cada uno de nosotros.
Jesús murió para aplacar la ira de Dios, para que Su justicia y santidad sean satisfechas. La Biblia llama a esto “propiciación” ver Romanos 3:23-25. Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios,
3:24 siendo justificados gratuitamente por su gracia, mediante la redención que es en Cristo Jesús,
3:25 a quien Dios puso como propiciación por medio de la fe en su sangre, para manifestar su justicia, a causa de haber pasado por alto, en su paciencia, los pecados pasados,
 Y 1 Juan 2:1-2. Hijitos míos, estas cosas os escribo para que no pequéis; y si alguno hubiere pecado, abogado tenemos para con el Padre, a Jesucristo el justo.
2:2 Y él es la propiciación por nuestros pecados; y no solamente por los nuestros, sino también por los de todo el mundo.
 Escriba en una pequeña tarjeta la palabra “propiciación” y medite acerca de esta humilde verdad, transformadora de vida, durante todo el día.

No hay comentarios:

Publicar un comentario