jueves, 28 de junio de 2018

LOS PADRES TENEMOS HOY LA RESPONSABILIDAD DE ORAR Y CLAMAR POR NUESTROS HIJOS.


LOS PADRES TENEMOS HOY LA RESPONSABILIDAD DE ORAR Y CLAMAR POR NUESTROS HIJOS.
“En el temor de Jehová está la fuerte confianza; y esperanza tendrán sus hijos” (Proverbios 14:26).
El Diablo odia a las familias que adoran juntas. Él permitirá que los padres sean religiosos, pero no quiere que se lleven a sus hijos al cielo, con ellos. Como resultado de esta estrategia diabólica, estamos perdiendo una generación completa. Nuestros hijos están siendo dejados atrás para que mueran y se vayan al infierno, porque estamos transigiendo con Satanás. Catherine Booth, esposa del fundador de “El Ejército de Salvación”, oraba de la siguiente manera: “Oh, Dios, no estaré delante de Ti sin todos mis hijos.” Hay muchos padres y madres hoy en día que también necesitan decir eso. ¡Esté firme, madre! ¡Esté firme, padre! Reúna a sus hijos cerca de usted, y ámelos trayéndolos a Jesús.
¿Es usted una madre, o un padre? Entonces tenga con sus hijos una cita diaria, semanal o mensual, para conversar acerca de la relación personal de ellos con Dios. ¿Por qué no empezar hoy mismo?
DIOS NOS HA LLAMADO A TODOS COMO FAMILIA A SER SANTOS.
“Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación” (1 Tesalonicenses 4:7).
Un ex-presidente de la Asociación Americana de Psiquiatría dijo: “Las relaciones prematrimoniales (físicas), resultantes de la así llamada “nueva moralidad”, en gran manera ha aumentado el número de gente joven en los hospitales mentales.”
El Dr. Billy Graham dijo que él habló con el Decano de la Facultad de Psiquiatría de una de nuestras grandes universidades, y que en ese tiempo más del 50% de los estudiantes en esa universidad sufrían de desórdenes psicológicos debido al problema de relaciones inmorales.
Amigo (a), ¿por qué Dios nos dice que debemos vivir una vida pura? No sólo es para que tengamos compañerismo con Él, sino también para nuestra propia salud mental. Dios sabe que la santidad trae vida a nuestros huesos, sanidad a nuestros corazones y gozo a nuestros pasos.
¿Qué piensa usted cuando escucha que necesita vivir una vida santa? Usted  tendrá un buen comienzo si empieza a aplicar la exhortación de la Palabra de Dios en Colosenses 3:12-14. Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia;
3:13 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros.
3:14 Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.
“Clemente es Jehová, y justo; sí, misericordioso es nuestro Dios” (Salmos 116:5).
¿Está preocupado por algo hoy? ¿Qué es? Nómbrelo y entrégueselo al Señor. Él es más que capaz de llevar su agobio. Pídale que le dé la fe para confiarle a Él sus cargas.
OREMOS SIN CESAR POR NUESTROS HIJOS, COMO DICE LAS ESCRITURAS.
“En quien tenemos seguridad y acceso con confianza por medio de la fe en Él” (Efesios 3:12).
El pastor Rogers enseñó: “Uno de los grandes privilegios que usted y yo tenemos es el privilegio de orar. Yo creo que cuando lleguemos al cielo, una de las cosas que nos maravillará es saber que oramos tan pobremente y tan poco aquí en la tierra. Esta es la situación que hoy vivimos:
1. Quiero decirle que usted no tiene un fracaso en su vida, que no sea omisión de oración.
2. Usted no tiene una necesidad en su vida que la oración no pueda suplirla. 3. No hay ningún pecado en su vida que una vida apropiada de oración no pueda vencer.”
El compositor de himnos José M. Scriven escribió estas palabras: “¿Vive el hombre desprovisto de paz, gozo y santo amor? Esto es porque no llevamos todo a Dios en oración.”
Amigo (a), en lugar de estar retorciéndonos las manos, debemos estar doblando nuestras rodillas.
Invierta algún tiempo en la oración, ofreciendo alabanzas a Dios por escuchar y contestar las oraciones traídas ante Él. Pudiera ser que Él conteste: “Sí”. También pudiera ser que conteste: “No”, y hasta es posible que Él diga: “Espera.” Pero, mi amigo, Él contestará sus oraciones.
LIMPIEZA Y SANTIDAD ES LO QUE DIOS QUIERE DE SUS HIJOS.
“Lávame más y más de mi maldad, y límpiame de mi pecado” (Salmos 51:2).
Antes de que el sacerdote pudiera entrar en el lugar Santísimo, tenía que detenerse en el lavabo y lavarse las manos y los pies. Él ya se había bañado desde la cabeza hasta los pies, pero el piso del tabernáculo era de tierra. Tampoco había utensilios, así que sus manos estaban sucias. Esta preparación final antes de entrar en la presencia de Dios, era el despojarse de la contaminación del mundo, lavándose las manos y los pies. Cuando estamos en contacto con el mundo, estamos contaminados. No necesitamos bañarnos completamente. Ya somos salvos. Pero cada día debemos pedir a Dios que mire nuestros corazones y nos limpie de nuestros pecados. ¿No sería maravilloso si cada uno de nosotros viniera a la presencia del Señor con la seriedad con que lo hacían los sacerdotes en el Antiguo Testamento? ¡Deberíamos!
¿Se ha acercado usted al lavabo esta mañana? Si no lo ha hecho, arrodíllese delante de Dios ahora mismo, y haga del Salmo 139:23 y 24 su oración. Dios está esperando para perdonarle: “Examíname, oh Dios, y conoce mi corazón; pruébame y conoce mis pensamientos; y ve si hay en mí camino de perversidad, y guíame en el camino eterno.”
DIOS NOS HA HECHO UNA NUEVA CREACIÓN, ¿POR QUÉ NO SEGUIR ASÍ?
 “De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas” (2 Corintios 5:17).
Durante el otoño, el pastor Rogers y su esposa disfrutaban mirar la caída de las hojas, puesto que tenían varios árboles en el patio trasero de su casa, pero hay algunos árboles que mantienen sus hojas hasta la primavera. Sus hojas se secan y se tornan cafés, pero no se desprenden de las ramas. Y en la primavera, estos árboles pierden esas hojas, cuando las nuevas hojas reclaman su lugar. Eso es exactamente lo que sucede con nuestros viejos hábitos y vida, cuando encontramos al Señor Jesús. La nueva vida empuja hacia fuera a la vida antigua. No es un asunto de ir arrancando hojas. La vida cristiana no se forja de esa manera. Nuestra vida nueva reemplaza nuestra vida vieja, cuando nacemos de nuevo.
¿Sabe usted que es imposible vivir la vida cristiana? Quiero decir, es imposible vivir la vida cristiana apartados del Espíritu Santo. Pídale a Dios que le muestre dónde usted está tratando de vivir la vida cristiana en su propia fortaleza. Ruegue Su perdón, y rinda su voluntad a Él, hoy.
“NO TE TOMES EL DÍA LIBRE”
MEJOR DICHO NO TE DUERMAS, TENGAMOS LOS OJOS DESPIERTOS TODOS LOS DÍAS. LOS TIEMPOS SON MALOS, LO DICE LA ESCRITURA.
Años atrás, existía un cantante muy reconocido, que pensaba que podía cambiar al mundo con su música, introduciendo en su letra los conceptos de amor y paz, pero justamente dos días antes de subir al escenario, lo buscaron unos hombres armados y le dieron dos disparos en su pierna para amedrentarlo y que él nunca más se atreviera a volver a cantar.
Pero después de los dos días este valiente cantante realizó su show con la pierna herida, entonces muchos reporteros vinieron a entrevistarle y le preguntaron; Tan pronto ¿Por qué no esperaste tu recuperación? A lo que él respondió; “Los que se encargan de hacer de este mundo un lugar peor no se toman el día libre, porque lo haré yo?”
“En lo que requiere diligencia, no perezosos; fervientes en espíritu, sirviendo al Señor” -  Romanos 12:11.
En diferentes partes de la Biblia, Dios nos habla y exige “diligencia”. En el diccionario la palabra “Diligencia” significa; Rapidez, prontitud, agilidad, o cuidado. Esmero y eficacia al realizar algo. Dios espera diligencia de nuestra parte; cuando servimos, cuando obedecemos, en su camino Dios quiere que seamos fervientes y no flojos!
“...El que duerme en el tiempo de la siega es hijo que avergüenza.” - Proverbios 10:5.
A veces pienso que el diablo está haciendo un buen trabajo, él no se toma el día libre, está destruyendo familias, con adulterio, con fornicación, está dañando vidas con drogas o bebidas, está dejando a niños sin padres, madres solteras, con heridas profundas en los corazones, mientras nosotros avergonzamos a Dios porque estamos durmiendo...
“Despierta, despierta, vístete de poder, oh Sion; vístete tu ropa hermosa, oh Jerusalén, ciudad santa...” Isaías 52:1.
Despierta! Tenemos mucho trabajo! Muchos necesitan que la iglesia despierte y se vista de poder! Tu eres santo, no eres cualquier cosa, no puedes seguir en el mismo lugar! Hoy decide servirle con todas tus fuerzas, con toda tu mente y con todo el corazón. Él se merece lo mejor de nuestras vidas. Dale lo mejor de ti y hazlo con diligencia!!!
Autor(a). Shirley Chambi.
TENEMOS UNAS RESPONSABILIDADES ANTE LOS DEMÁS, ESTO QUIERE DECIR QUE NUESTROS TESTIMONIOS DELANTE DE LA FAMILIA Y DELANTE DEL MUNDO, ES MUY IMPORTANTE.NUESTRA SANTIDAD DEBE DE VERSE.
Considerémonos unos a otros para estimularnos al amor y a las buenas obras. Hebreos 10:24.
He descubierto que cuanto más cerca estoy de las personas espirituales que me rodean, tanto más fácil me resulta llevar una vida recta porque ellas me exigen responsabilidad. Si algo no anda bien en mi vida, ellas me lo señalan. Dios me ha dado una esposa y tres hijos ya adultos que esperan que yo ande por la senda recta. Si me aparto de ella, una de esas personas o a veces las cuatro me dirán que me estoy saliendo de la línea.
NO DEJAR DE CONGREGARNOS Y SERVIRLE AL SEÑOR.
Es fácil comenzar a pensar que, si se hace un esfuerzo, se puede llevar una vida espiritual sin estar en una iglesia ni tener amigos cristianos. Eso pudiera ser posible, pero usted tendrá un tiempo difícil creciendo en su fe. La responsabilidad ante los demás ejerce una presión útil hacia la santidad.
 Que el versículo de hoy lo guíe hacia normas espirituales más firmes.
Que El Señor nos ayude a vivir una vida que lo Honre y le dé la Gloria; esto debería ser parte de nuestras decisiones personales.

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