ACERCARSE A
DIOS ES LO QUE DEBEMOS HACER TODOS LOS DÍAS.
Pero en
cuanto a mí, el acercarme a Dios es el bien; he puesto en el Señor mi esperanza,
para contar todas tus obras. (Salmo 73:28).
Una mujer
que deseaba orar, tomó una silla vacía y se arrodilló delante de ella. Con
lágrimas en los ojos, exclamó: «Padre celestial, por favor, siéntate aquí;
¡necesitamos hablar!». Después, mirando directamente el espacio sobre la silla
vacía, oró. Ella demostró confianza al acercarse al Señor; imaginó que Él
estaba sentado en la silla y creyó que escuchaba su petición.
Nuestro
tiempo con Dios es un momento importante, cuando estamos con el Todopoderoso.
Dios se acerca a nosotros cuando acudimos a Él.
Santiago 4:8.
Acercaos a Dios, y él se
acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble
ánimo, purificad vuestros corazones.
Nos aseguró:
«Yo estoy con vosotros todos los días» Mateo 28:20.
Nuestro
Padre celestial siempre quiere que nos acerquemos a Él y está listo para
escucharnos.
A veces, nos
cuesta orar, porque nos sentimos cansados, somnolientos, enfermos y débiles.
Sin embargo, Jesús entiende nuestras debilidades y tentaciones Hebreos 4:15.
Porque no tenemos un sumo sacerdote que no pueda compadecerse de nuestras
debilidades, sino uno que fue tentado en todo según nuestra semejanza, pero sin
pecado.
Por eso,
podemos acercarnos «confiadamente al trono de la gracia, para alcanzar
misericordia y hallar gracia para el oportuno socorro» (v. 16).
Dios está en
todas partes, disponible en todo momento, y siempre escucha.
Oremos a Dios de esta manera: Señor, gracias
porque puedo orar a ti en cualquier momento y lugar. Pon en mi corazón el deseo
de acercarme a ti. Quiero aprender a acudir a ti con fe y confianza.
Autor:
Escritores de Nuestro Pan Diario.
¿QUIÉN QUE
VIVA NO HA PASADO ALGUNA NOCHE DIFÍCIL?
Todos hemos
tenido noches oscuras. Pero no todas las noches son tan oscuras. ¿Qué tiene la
noche que pareciera atraer o acrecentar pesares, dolores y quebrantos?
TU DÍA COMIENZA CUANDO TE DECIDES A ALABAR A
DIOS.
David nos
cuenta que la noche termina cuando comienza el día; y tu día comienza cuando te
decides a alabar a Dios.
No tienes que sentarte a llorar hasta
que todo acabe .Lo último que verás en tu noche más oscura, lo último que se
escuchará antes de que amanezca será tu adoración al Señor.
Job lo dijo
de esta manera: Job 35:10-11. Y ninguno dice: ¿Dónde está Dios mi Hacedor, Que
da cánticos en la noche, 35:11
Que nos enseña más que a las bestias de la tierra, Y nos hace sabios más que a las aves
del cielo?
David, una
vez más, lo declara. Salmo 43: Entraré al altar de Dios,
Al Dios de
mi alegría y de mi gozo;
Y te alabaré
con arpa, oh Dios, Dios mío.
43:5 ¿Por
qué te abates, oh alma mía,
Y por qué te
turbas dentro de mí?
Espera en
Dios; porque aún he de alabarle,
Salvación
mía y Dios mío.
Y otra vez:
“Al señor busqué en el día de angustia; a él alzaba mis manos de noche y sin
descanso” Salmo 77:2.
Y finalmente: “… Aún la noche resplandecerá
alrededor de mí” (Salmo 139:11).
LA ADORACIÓN
ACELERA EL AMANECER.
“Más sobre vosotros (los que teméis mi nombre)
nacerá el sol de Justicia, y en sus alas traerá salvación, y saldréis y
saltaréis como becerros de la manada” (Malaquías 4:2).
El apóstol
Pablo se encontraba en una nave rumbo a Italia cuando de repente les azotó,
primero un viento, luego una tormenta y por último un huracán.
La nave se
estaba desarmando, no tenían velas, ni mástil ni timón, iban a la deriva, y por
14 días no habían comido, ni habían visto luz de sol, ni luna, ni estrella (era
su noche más oscura).
Puesto en
pie exhortó a todos a recobrar
ánimo diciendo: ” esta noche ha estado conmigo el ángel de Dios (de quien soy y
a quien sirvo) diciendo: No temas…” Hechos 27: 23.
Aunque sobre
el mundo entero se cierna la noche más oscura, sobre ti amanecerá la gloria del
Señor Isaías 60:1.2. Levántate, resplandece; porque ha venido tu luz, y la
gloria de Jehová ha nacido sobre ti.
60:2 Porque
he aquí que tinieblas cubrirán la tierra, y oscuridad las naciones; más sobre
ti amanecerá Jehová, y sobre ti será vista su gloria.
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