NO PERMITAS QUE LA BURLA ACABE CON TU FE EN DIOS.

NO PERMITAS QUE LA BURLA ACABE CON TU FE EN DIOS.

SOMOS OBREROS Y GUERREROS.

La oposición no es solo una evidencia de que Dios está bendiciendo, sino es también una oportunidad para que nosotros crezcamos. Las dificultades que aparecieron en el trabajo sacaron lo mejor de Nehemías y de su pueblo. Refiriéndose a Satanás, Pablo escribió: "pues no ignoramos sus maquinaciones" (2 Co. 2:11). Este capítulo presenta cuatro de las maquinaciones de Satanás para oponerse a la obra del Señor, y también nos dice cómo el pueblo de Dios puede mantenerse firme y derrotar al enemigo. Si usted empieza a edificar, pronto se verá batallando; así que ¡prepárese!

Atacando con: La Burla (4:1-9). Por lo cual, teniendo nosotros este ministerio según la misericordia que hemos recibido, no desmayamos.

4:2 Antes bien renunciamos a lo oculto y vergonzoso, no andando con astucia, ni adulterando la palabra de Dios, sino por la manifestación de la verdad recomendándonos a toda conciencia humana delante de Dios.

4:3 Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto;

4:4 en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios.

4:5 Porque no nos predicamos a nosotros mismos, sino a Jesucristo como Señor, y a nosotros como vuestros siervos por amor de Jesús.

4:6 Porque Dios, que mandó que de las tinieblas resplandeciese la luz, es el que resplandeció en nuestros corazones, para iluminación del conocimiento de la gloria de Dios en la faz de Jesucristo.

4:7 Pero tenemos este tesoro en vasos de barro, para que la excelencia del poder sea de Dios, y no de nosotros,

4:8 que estamos atribulados en todo, mas no angustiados; en apuros, mas no desesperados;

4:9 perseguidos, más no desamparados; derribados, pero no destruidos;

Thomas Carlyle, el autor y crítico británico, llamó a la burla "el lenguaje del diablo". Algunas personas que son capaces de mantenerse firmes cuando los están disparando, se derrumban cuando se burlan de ellos. Shakespeare llamó a la burla "balas de papel del cerebro"; pero estas balas han matado a muchos guerreros.

No es raro que el enemigo insulte a los siervos de Dios. Goliat se burló de David cuando el joven pastor se enfrentó al gigante con solo una honda en su mano (1 S. 17:41-47). Los soldados se mofaron de Jesús durante su juicio (Le. 22:63-65) y el populacho lo hizo cuando colgaba en la cruz (23:35-37); y algunos de los héroes de la fe tuvieron que soportar la burla (He. 11:36). Cuando el enemigo se ríe de lo que el pueblo de Dios está haciendo, es por lo general una señal de que Dios bendecirá a su pueblo de una forma maravillosa. Cuando el enemigo ruge en la tierra, Dios se ríe en los cielos (Sal. 2:4). Sanbalat y sus amigos se habían empezado a burlar de los judíos incluso antes que empezaran a trabajar en los muros. "Hicieron escarnio de nosotros", escribió Nehemías, "y nos despreciaron" (Neh. 2:19). No se nos explica qué clase de relación especial tenía Sanbalat con el ejército de Samaria. Quizá tenía el ejército movilizado como una demostración de fuerza para asustar a los judíos. Con su discurso inicial ante el ejército, Sanbalat intensificó el poder de la burla al hacer que gente importante se riera de los judíos.

- Primero, se burló de los obreros al llamarlos "débiles judíos" (4:2). La palabra débil tiene el sentido en este caso de "marchito, miserable". Los judíos eran como flores cortadas que se secaban. No disponían de recursos humanos que los demás pudieran ver, pero el enemigo no podía ver sus grandes recursos espirituales. La gente del mundo no puede comprender que Dios se complace en usar instrumentos débiles para llevar a cabo su obra (1 Co.1:18-31). El mundo se gloría en su riqueza y poder, pero el pueblo de Dios se gloría en su pobreza y debilidad. Cuando somos débiles, entonces somos fuertes (2 Co. 12:1-10).

- Segundo, Sanbalat se burló del trabajo mismo al hacer unas preguntas burlándose. ¿Se van a fortificar a sí mismos?, debió provocar enormes risotadas en el ejército samaritano. ¿Cómo podría un remanente de débiles judíos esperar construir una muralla suficientemente fuerte como para proteger la ciudad del ejército? ¿Van a sacrificar? implica: Se van a necesitar algo más que oraciones y adoración para reedificar la ciudad. Esa pregunta era una blasfemia en contra de Jehová Dios, porque Sanbalat estaba negando que Dios ayudaría a su pueblo. ¿Acabarán en un día? sugiere que los judíos no sabían cuán difícil era la tarea y pronto la abandonarían. En su última pregunta: "¿Resucitarán de los montones del polvo las piedras que fueron quemadas?"

- Tercero, Sanbalat se burla de los materiales que estaban usando. Las piedras las sacaban de los montones de escombros y probablemente estaban tan viejas y dañadas que no durarían cuando las colocaran en el muro. Aunque es cierto que la piedra caliza se debilita con el fuego, también es cierto que los muros fueron " derribados" mientras que las puertas fueron "consumidas por el fuego" (Neh. 2:13). A pesar de lo que Sanbalat decía, había todavía abundancia de buen material que podían usarlo los edificadores. Tobías amonita era uno de los dignatarios visitantes que pasó revista al ejército samaritano; y cuando llegó su turno para hablar, se burló del producto final (4:3). No se va a necesitar un ejército para derribarlo, ¡una sola zorra es suficiente! Por supuesto, mucho de lo que Sanbalat y Tobías dijeron era cierto desde un punto de vista humano; porque el remanente judío era débil y pobre, y aquella obra era demasiado para ellos. Pero ellos tenían una gran fe en un gran Dios, y eso iba a hacer que todo fuera diferente. Autor: W. Wiersbe