CREER EN
DIOS Y EN JESUCRISTO Y EN EL
ESPÍRITU SANTO Y EN TODA SU PALABRA.
EL CREER
PRESUPONE:
CONOCIMIENTO
EN DIOS Y SU HIJO JESUCRISTO.
RENOVACIÓN
DE LA MENTE, EL ESPÍRITU Y EL CORAZÓN.
ÉTICA PARA
DISCERNIR ENTRE LO BUENO Y LO MALO.
ESPERANZA Y
CERTEZA DE LA VERDAD ABSOLUTA DE DIOS.
RAZÓN PARA DAR GLORIA, HONRA, HONOR Y ALABANZA AL DIOS VIVO.
UN HOMBRE
RICO RECONOCIÓ A JESÚS COMO UN HOMBRE BUENO.
ESTE
ATRIBUTO SOLO SE LE DABA A DIOS; ENTONCES EL RECONOCE A JESÚS COMO DIOS.¿ CREES
TU LO MISMO?
Ninguna
pregunta es de mayor importancia que la que hizo «un hombre principal» (Lucas
18:18), que «vino. . . corriendo, e hincando la rodilla delante de Él (Jesús)»
(Marcos 10:17). Este hombre era «joven» (Mateo 19:20,22), y tenía grandes
riquezas. Hincándose de rodillas delante de Jesús, el joven le preguntó:
«Maestro bueno, ¿qué haré para heredar la vida eterna? Jesús le dijo. . . No
adulterarás; no matarás; no hurtarás; no dirás falso testimonio; honra a tu
padre y a tu madre» (Lucas 18:18-27; ver Mateo 19:16-30; Marcos 10:17-31).
Nadie nunca se dirigía a un escriba o a un rabino como «Maestro bueno» — sólo a
Dios se le llamaba Bueno. Tres de los evangelios registran que el joven
reconoció que Jesús era más que otro Maestro, pero como el «Buen Maestro» (Señor).
Él sabía que, más allá de la vida física, había una eternidad que él quería
heredar.
En respuesta
a su suma importante pregunta: «¿qué haré . . . ?», entonces Jesús le dijo:
«Aún te falta una cosa: vende todo lo que tienes, y dalo a los pobres, y
tendrás tesoro en el cielo; y ven, sígueme. Entonces él, oyendo esto, se puso
muy triste, porque era muy rico» (Lucas 18:22-23). A esta respuesta no se le
debe torcer el sentido a decir que la vida eterna se puede ganar por los
esfuerzos personales o por los sacrificios que se hacen en dar y ayudar a otras
personas. La vida eterna sólo viene por medio de Él (Jesucristo) quien «nos
amó, y nos lavó de nuestros pecados con Su sangre» (Apocalipsis 1:5). Este
joven no estaba dispuesto a dejar que Jesús fuese el Señor de su vida. Él no
quería dejar atrás la influencia, el prestigio, y la seguridad financiera que
sus riquezas proveían. Él pensó que él era un «buen hombre», muy religioso,
pero tristemente estaba perdido eternamente.
La Biblia no
condena a las personas sólo por ser ricos, pero: «A los ricos de este siglo
manda (instruye) que no sean altivos (orgullosos), ni pongan la esperanza en
las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios Vivo, que nos da todas
las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean
ricos en buenas obras, dadivosos, generosos (compartiendo); atesorando para sí
buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna» (I de
Timoteo 6:17-19).
Las
decisiones diarias y el estilo de vida revelan lo que en verdad se cree. Este
joven rico ilustra la razón por qué Jesús dijo: «estrecha es la puerta, y
angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan» (Mateo
7:14).
CUANDO
RECONOCEMOS A DIOS, EL SE ENCARGARÁ DE NUESTRO CAMINO.
Debemos de
leer Su Palabra — la Palabra de Dios. «Reconócelo en todos tus caminos, y Él
enderezará tus veredas» (Proverbios 3:6).
POR DIOS
ESTAMOS EN CRISTO JESÚS EL CUAL NOS HA HECHO POR DIOS SABIDURÍA Y JUSTIFICACIÓN
Y SANTIFICACIÓN Y REDENCIÓN.
Primera
Corintios 1:30: “Mas por Él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha
sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención.”
¿Qué
significa la sabiduría?
Mateo 6:34:
“Así que, no os afanéis por el día de mañana, porque el día de mañana traerá su
afán.”
En el crisol
de su sabiduría y en la bendición de su gracia, Dios ha diseñado algunos
problemas para usted el día de hoy, y todos los días de su vida. Hemos sido
bendecidos con dificultades. Así es, leyó lo correcto: ¡bendecidos! Lo peor que
puede pasarnos sería no tener dificultades. Si ese fuera el caso, nunca
llegaríamos a conocer cuánto necesitamos al Señor. En esencia, Dios nos dice:
“Te daré suficientes dificultades para este día.” Dios le da los problemas
necesarios para acercarlo a Él, pero también la gracia suficiente para
enfrentarlos diariamente.
¿Existe
alguna situación difícil en su vida? Si es así, agradézcale a Dios por
ponérsela en su camino, puesto que ésta le hace más como Jesús. Ahora, pídale
gracia para salir victorioso de esa dificultad.
Romanos
11:33: “¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de
Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos!”
EN MUCHAS OCASIONES EL HOMBRE NO TIENE UN BUEN CONCEPTO DE DIOS, SIN EMBARGO ÉL SI TIENE
UN GRAN CONCEPTO DE NOSOTROS.
Apocalipsis
5:12: “El Cordero que fue inmolado es digno de tomar el poder, las riquezas, la
sabiduría, la fortaleza, la honra, la gloria y la alabanza.”
El temor de
Jehová es el principio de la sabiduría; la necesidad de buscar la sabiduría; la
importancia de confiar en el Señor
SEA SABIO:
ESTUDIE Y OBEDEZCA LA PALABRA.
«Hijo mío,
si recibieres Mis Palabras, y Mis mandamientos guardares dentro de ti
(llevarlos en el corazón), haciendo estar atento tu oído a la sabiduría; si
inclinares tu corazón a la prudencia, si clamares a la inteligencia. . . (si)
como a la plata la buscares, y la escudriñares como a tesoros, entonces
entenderás el temor de Jehová, y hallarás el conocimiento de Dios» (Proverbios
2:1-5). «(Si) recibieres . . . haciendo estar atento . . . si inclinares tu
corazón . . . si clamares . . . la buscares, y la escudriñares (la sabiduría)
como a tesoros», esto nos habla de una dedicación seria, progresiva y diaria
para alcanzar un alto nivel espiritual.
LA PALABRA
HACE SABIO AL SENCILLO.
Hablando por
medio de Salomón, Dios nos está diciendo: «Toma Mi Palabra seriamente», porque
ella es la única que puede proveerte con la verdadera sabiduría espiritual que
te guiará y entonces «entenderás justicia, juicio y equidad, y todo buen
camino. Cuando la sabiduría entrare en tu corazón, y la ciencia fuere grata a
tu alma, la discreción te guardará; te preservará la inteligencia» (2:9-11).
DIOS YA
PREPARÓ LAS OBRAS, DEBEMOS EJECUTARLAS.
Uno de los
pensamientos más serios de esta vida es: «Porque el Hijo del Hombre vendrá en
la gloria de Su Padre con Sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a
sus obras» (Mateo 16:27).
Debemos de
leer la Palabra de Dios con un deseo intenso de aceptar Su sabiduría y Su
corrección para madurar espiritualmente.
“Él provee
de sana sabiduría a los rectos; es escudo a los que caminan rectamente” -
(Proverbios 2:7).
En Cristo,
existe sabiduría, fortaleza, seguridad y satisfacción. Cuando usted se acerca a
Él con urgencia, fervor, persistencia y expectativa, recibirá respuesta de Él.
Jesús no va a pensar que le está molestando, Él se complace cuando usted le
pide su sabiduría. Señor, necesito tomar una decisión. ¿Cuál universidad
escojo? ¿Me caso con esa persona o no? ¿Es este el trabajo que quieres que
tenga? ¿Cuál mecánico uso para reparar mi choque? ¿Dónde quieres que viva?
¿Alquilo o compro? Annie Johnson Flint escribió un edificante himno: “Su amor
no tiene límite, Su gracia no tiene medida, Su poder no posee fronteras
conocidas al hombre; Porque de sus infinitas riquezas en Jesús, Él da y da y da
otra vez.” Deposite todas sus cargas en Él hoy, porque Jesús ansía llenarle con
Él mismo.
Alábele:
“Señor gracia por proveer “de sana sabiduría a los rectos”. Gracias porque eres
“escudo a los que caminan rectamente” (Proverbios 2:7).
“Procura con
diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué
avergonzarse, que usa bien la Palabra de verdad” - (2 Timoteo 2:15).
Cuando los
hombres construyeron el Templo en el Antiguo Testamento, la Biblia nos dice que
Dios les dio un espíritu de sabiduría. Algunos traductores lo han llamado un
espíritu de “destreza o talento” porque estas palabras están fuertemente
entrelazadas. ¿Sabe lo que es vivir sabiamente? Es vivir diestramente
aprovechando su vida a lo máximo. Sea cual sea su trabajo ―un artista, un
médico, un carpintero, un contador, un maestro o una madre― viva su vida con
destreza. ¿Está pensando ir a un colegio vocacional o a una universidad a
cursar una carrera? Entonces, no falle en estudiar y ganar conocimiento, pero
recuerde esto: Todo nuestro conocimiento apartado de la sabiduría de Dios es
sólo ignorancia espléndida.
¿NECESITA
USTED SABIDURÍA?
“Y si alguno
de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos
abundantemente y sin reproche, y le será dada” (Santiago 1:5).
Santiago 1:5
nos dice que si no tenemos sabiduría, debemos pedírsela a Dios. Permítanos
decirle lo que eso significa literalmente. Si usted no tiene sabiduría,
pídasela al Dios Dador. ¿Ha pensado en Dios como “el Dios Dador”? ¿Qué
significa para usted que Dios anhela derramar sus bendiciones sobre usted? ¿Se
dice a usted mismo: “¡Qué bueno! Entonces veamos qué puedo sacarle a Dios.”? ¿O
le vuelve humilde saber que el Poderoso Dios, quien creó el aire que usted
respira, el suelo por el que camina, y el cuerpo en el cual habita, éste es el
Dios que le ama y que quiere bendecirle? Oramos que sea esto último, porque ése
es el corazón de un hijo o hija de Dios.
Pídale a
Dios que le humille. Que ponga en usted un corazón como de niño, para que
busque al Padre más que a ninguna otra persona o cosa.
MIRE DÓNDE
ESTÁN LOS VERDADEROS SABIOS.
“Sino que lo
necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los sabios; y lo débil del
mundo escogió Dios, para avergonzar a lo fuerte; y lo vil del mundo y lo
menospreciado escogió Dios, y lo que no es, para deshacer lo que es, a fin de
que nadie se jacte en su presencia” (1 Corintios 1:27-29).
¿Qué
sabiduría hay en morir en una cruz? Los griegos no podían entenderlo, y sin
embargo ésa es la sabiduría de Dios. Dios es tan sabio que la persona con un
alto cociente intelectual no lo puede entender. Si usted pudiese llegar a Dios
con su intelecto, entonces Dios no es justo porque todos los inteligentes del
mundo tendrían una gran ventaja, y el resto de nosotros quedaríamos en las
sombras. Su espiritualidad se basaría en su intelecto. Estamos contentos que
Dios “escondió estas cosas de los sabios y los entendidos, y las reveló a los
niños” (Mateo 11:25). No es que Dios “esté tan alto” que sólo unos pocos lo
pueden entender. No. Más bien, Dios se ha puesto Él mismo a tal nivel que pocos
de nosotros estamos dispuestos a bajar lo suficiente para verlo manifestarse o
revelarse a nosotros.
¡Alabe a
Dios por haberle escogido! ¡Alábele por su sabiduría!
¿QUÉ
SIGNIFICA JUSTIFICACIÓN?
Romanos
8:30: “A los que justificó, a éstos también glorificó.”
¿Qué
significa ser justificado? Significa ser declarado justo. La justificación no
es ser bueno, aun cuando el ser bueno glorifica a Dios. Cuando usted pone su fe
en donde Dios pone sus pecados, Dios pone el sello de “Justo” sobre su nombre
en el libro de la vida del Cordero. No es por lo que usted ha hecho o hará,
sino por haber sido justificado. Ninguna corte humana lo puede justificar. Sin
embargo, lo que Dios hace no es solamente tomar al pecador y perdonarle sus
pecados, sino que hace al culpable justo como si nunca jamás hubiera pecado.
Eso es justificación.
Si usted
viviera cada momento creyendo en la justificación que Dios le ha dado, ¿cómo se
fortalecería su fe? ¿Tendría más disposición para compartir el regalo del amor
de Dios?
LO QUE JOB
DICE DE DIOS.
Satanás
impulsó los ataques contra Job por medio de su esposa y sus «dedicados» amigos
en un esfuerzo para comprobar su acusación que Job iba a maldecir a Dios si sus
muchas bendiciones fuesen eliminadas.
Job
continuamente afirmó: «He aquí, aunque Él me matare, en Él esperaré». Job podía
decir con suma confianza: «Sé que seré justificado» (Job 13:15,18).
Él no llegó
a ser controlado por la amargura o el rencor contra sus acusadores o contra
Dios. Al contrario, él miró a su futuro y a estar con Dios después de su
muerte, diciendo: «Si el hombre muriere, ¿volverá a vivir? Todos los días de mi
edad esperaré, hasta que venga mi liberación» (14:14), lo que significa:
«Después de morir yo viviré otra vez y seré cambiado».
Los
creyentes siempre podemos dar gracias a Dios por un Perfecto y Sumo Sacerdote,
«por lo cual (Cristo) puede también salvar perpetuamente a los que por Él se
acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos (por nosotros)»
(Hebreos 7:25). Porque hemos creído en Jesucristo como el Salvador y Señor de
nuestras vidas.
La fe
inmutable de Job en Dios fue el resultado de su obediencia a la Palabra de Dios
revelada. Él dijo: «Del mandamiento de Sus labios nunca me separé; guardé las
Palabras de Su boca más que mi comida» (Job 23:12).
ABRAHAM
TAMBIÉN FUE JUSTIFICADO.
«¿No fue
justificado por las obras Abraham nuestro padre, cuando ofreció a su hijo Isaac
sobre el altar? ¿No ves que la fe actuó juntamente con sus obras, y que la fe
se perfeccionó por las obras?» (Santiago 2:21-22).
Primera
Corintios 1:30: “Mas por Él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha
sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención.”
¿QUÉ ES LA SANTIFICACIÓN?
Si Dios el
Padre nos eligió y el Espíritu Santo nos separa para su santo propósito,
entonces, ¿qué parte tenemos usted y yo? Existe la soberanía divina y la
responsabilidad humana. Usted ha sido santificado para obedecer. La salvación
es gratis, pero usted debe obedecer. La soberanía divina de Dios en elegirnos
no nulifica nuestra responsabilidad a su llamado. Usted ha sido salvado de este
mundo, enviado de regreso al mundo a testificar al mundo, y esa es la única
labor que usted tiene en este mundo. Recuerde, usted no trabaja para lograr la
salvación, sino trabaja o sirve porque es salvo. Alguien bien dijo: “Yo no trabajaré
para salvar mi alma, esa labor la ha hecho mi Señor. Sin embargo, trabajaré
como un esclavo por amor al Hijo amado de Dios.”
¿QUÉ
SIGNIFICA REDENCIÓN?
Juan 10:18:
“Nadie me la quita, sino que Yo de Mí mismo la pongo. Tengo poder para ponerla,
y tengo poder para volverla a tomar. Este mandamiento recibí de mi Padre.”
La verdad
profunda del amor del Salvador es comprensible cuando consideramos una verdad
importante: Jesucristo es la única persona que ha escogido morir. “Pero, ¿qué
de los kamikaze, los pilotos japoneses suicidas en la segunda guerra mundial?
¿Qué de los soldados quienes, habiendo pisado y detonado una mina,
permanecieron inmovibles hasta que sus compañeros se alejaran lo suficiente
para que estuviesen a salvo?” Ellos no escogieron morir, sólo escogieron cuándo
morir. Nosotros y todo aquel que aún esté por nacer, eventualmente moriremos.
Sin embargo, únicamente hubo Uno que no tenía que morir. Los clavos no
retuvieron a nuestro Salvador en esa cruz. Cuerdas plateadas de amor y ataduras
doradas de redención fueron las que le mantuvieron allí.
Lea los
Salmos 22, 23 y 24 y regocíjese en la provisión, protección y providencia del
Buen Pastor.
Lucas 21:28:
“Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza,
porque vuestra redención está cerca.”
En una
ocasión el pastor Rogers testificó: “Me pongo a pensar lo que pasaría si los
científicos empiezan a crear a un humano de una célula de otro humano. Vivimos
en días extraños, ¿no lo cree? No obstante, quiero decirle que nuestra
esperanza no la encontramos en la ciencia. No hay ninguna bendición en el libro
de ciencias. Amigo (a), la bendición la encontramos en la segunda venida del
Señor Jesucristo. Cuando veo cosas como la clonación, no me perturban. A veces
me entristecen, pero no me desconciertan porque conozco la palabra de Dios. Sé
que es el cumplimiento de las profecías, y que junto con todos los santos puedo
decir: ‘¡Alabado sea Dios! Se está oscureciendo gloriosamente.’”
La próxima
ocasión que lea algo en el periódico que apunta a los últimos tiempos, úselo
para compartir la segunda venida de Jesús con alguien.
Colosenses
1:16: “Todo fue creado por medio de Él y para Él.”
¿Quiere
saber el significado de “todo”? El significado de todo es únicamente Jesús.
Usted puede pensar que esto es una exageración. Vivimos en un grandioso
universo, billones de años luz en expansión. Y la Biblia nos dice que “todo fue
creado por medio de Él y para Él”. No existe nada que el Señor Jesucristo no
haya hecho. La respuesta a la creación es solamente Jesús. La gente dice que el
mundo necesita ser salvado. Sin embargo, lo que el mundo realmente necesita es
redención. ¿Y de dónde vendrá esa redención? No vendrá de ningún credo, ningún
sistema, ninguna causa, sino exclusivamente de Jesús. Todo el universo, los
planes de Dios, y la conclusión de los siglos son el resultado de dos palabras:
¡SÓLO JESÚS!
Salmos
104:33: “A Jehová cantaré en mi vida; a mi Dios cantaré salmos mientras viva.”
Tenemos un
Dios que está presente en toda la creación, por ello debemos reconocerlo.
Tenemos un Dios que es poderoso y soberano, por ello debemos respetarlo.
Tenemos un Dios con firme propósito, por ello debemos reverenciarlo. Tenemos un
Dios que es nuestro salvador personal, por ello debemos recibirlo. Todo esto lo
encontramos en Génesis 1:1 donde revela: “En el principio creó Dios los cielos
y la tierra. ”Tenemos una obligación para con Dios. Le pertenecemos a Él
doblemente. Primero, somos suyos por la creación y segundo, somos suyos por la
redención. Él nos hizo y Él nos compró.
“Puestos los
ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, el cual por el gozo puesto
delante de Él sufrió la cruz, menospreciando el oprobio, y se sentó a la
diestra del trono de Dios” (Hebreos 12:2).
¿Qué
significa que Jesús es el “autor y consumador” de nuestra fe? La palabra griega
para autor es “archegos”, y quiere decir que Él es el Capitán, el Líder, el
Príncipe de nuestra fe. La palabra griega para consumador es “teleiotes”, y
significa que Él es quien “completa” nuestra fe. Jesús pagó el precio, para que
usted pudiera ser salvo. ¿Quiere saber cómo correr la carrera? Jesús es su
ejemplo. Fije sus ojos en Él. Él es el Salvador que no sólo le enseña cómo
correr la carrera, sino que entra en usted por medio del Espíritu Santo, y
corre la carrera a través de usted. ¡Alabado sea Dios, porque nunca estamos
solos!
Adore a Dios
en oración y alabanza porque no sólo es el autor de su fe al otorgársela como
un regalo no merecido, sino que también es el consumador de su fe al asegurar
su salvación en la sangre expiatoria de su Hijo.
UNA PROMESA
PARA USTED CREER. PERO ¿LE CREERÁ USTED A JESUCRISTO?
Juan 14:2:
“Voy, pues, a preparar lugar para vosotros.”
¿Cree usted
que existe una morada en los cielos que le espera? ¡Sí la hay! Porque Jesús no
puede mentir. Él es la verdad encarnada. Él siempre dijo la verdad y nos afirmó:
“Si así no fuera, Yo os lo hubiera dicho.” El Señor Jesús no dejaría que la
esperanza del cielo palpite en su corazón si fuera simplemente una mentira, una
superstición o una tierna ilusión. El cielo no es simplemente un estado de
ánimo, ni una condición. Es un lugar tan real que Jesús está allí literalmente
en un cuerpo resucitado. Hay un cuerpo en ese lugar llamado cielo. Éste es el
cuerpo resucitado de Cristo. El cielo es un lugar en el mapa de Dios.
¿Anhela la
casa de sus sueños? Si nunca ha pensado en lo que podría ser la casa perfecta
para usted, piense en su hogar celestial. ¡Nada podría ser más perfecto!
¿ESTÁ USTED ENSEÑANDO A SUS HIJOS A CREER EN JESUCRISTO?
Salmos 35:9:
“Entonces mi alma se alegrará en Jehová; se regocijará en su salvación.”
¿Sus hijos
creen que lo más importante en su vida es Dios? Debemos celebrar a Dios delante
de nuestros hijos. Nuestros hijos deben creer y saber que nosotros, como
padres, no somos perfectos. Ellos deben saber que amamos a Dios. Y así, no nos
preocuparíamos si alguien, alguna vez, les pregunta a nuestros hijos: “¿Qué es
lo más importante para tu papá y para tu mamá?” Tendremos la absoluta seguridad
de que ellos contestarán: “Lo más importante para mis padres es su relación con
Dios.”
¿Es usted
padre de familia? Entonces, pregunte a sus hijos qué es lo que ellos creen que
es lo más importante para usted. Si le contestan algo que no sea su relación
con el Señor, haga los cambios necesarios en su vida para que ésta refleje su
prioridad primordial.