EL PECADO DE
LA IDOLATRÍA EN NUESTROS CORAZONES.
LA IDOLATRÍA
Y SUS CONSECUENCIAS.
Éxodo 20:3:
“No tendrás dioses ajenos delante de Mí.”
¿Qué es un
ídolo? Un ídolo es lo que hace un hombre cuando toma sus ideas, las concretiza
construyendo algo con sus manos y luego lo adora. Lo que él hace es adorarse a
sí mismo. Usted puede objetar: “No soy culpable de idolatría.” Veamos: ¿Hay
algo que usted ame más que a Dios? ¿Algo a lo que le teme más que a Dios? ¿Algo
a lo que usted le sirve más que a Dios? ¿Algo en lo que confíe más que en Dios?
¿Acertamos? Bueno, quizás usted dirá: “Yo le doy a Dios un lugar en mi vida.”
Dios no quiere un lugar en su vida. Entonces usted añade: “Yo le doy
importancia a Dios en mi vida.” Dios detesta esa importancia en su vida. Dios
demanda preeminencia en su vida y no se conformará con nada menos.
¿Existe
alguien o algo que toma prioridad en su vida que no sea Dios? Si lo hay,
confiéselo y arrepiéntase. Ahora, ponga en el trono de su vida al legítimo
dueño de ésta: ¡el Señor Jesús!
¿SIGUE USTED
TENIENDO EL PRIMER AMOR?
“Pero tengo
contra ti, que has dejado tu primer amor. Recuerda, por tanto, de dónde has
caído, y arrepiéntete, y haz las primeras obras; pues si no, vendré pronto a
ti, y quitaré tu candelero de su lugar, si no te hubieres arrepentido” -
(Apocalipsis 2:4-5).
EL CULTO AL
CUERPO: SEXUALIDAD Y SENSUALIDAD.
La década de
los sesenta trajo la revolución sexual. Ahora, explíquenos una vez más, ¿cómo
el “amor libre” iba a traer paz y armonía a nuestro mundo? La gente está siendo
absorbida en turbulentas cloacas de pecado. Los cimientos de los hogares se
desmoronan. Preciosos bebecitos en el vientre son condenados a muerte. Las
enfermedades transmitidas sexualmente están fuera de control. Parece que fuera
demasiado tarde, y debemos regresar “a nuestro primer amor”. Es tiempo de amar
al Señor con todo nuestro corazón, nuestra alma, nuestra mente, y amar al
prójimo como nos amamos nosotros mismos (ver Mateo 22:36-39). Es tiempo de
hacer conocer a la gente del “amor libre” ofrecido por nuestro Salvador, cuando
Él murió para perdonar nuestros pecados y comprar nuestra salvación por la
eternidad.
TODO LO QUE
DESPLACE A JESUCRISTO, SE CONVIERTE EN UN ÍDOLO.
¿Cómo sabe
que ha dejado “su primer amor”? Pregúntese: “¿Hay algo o alguien a lo que sirvo
más que a Dios? ¿Hay alguien o algo a lo que amo más que a Dios?” Si lo hay,
entonces confiese ese pecado, y arrepiéntase de su pecado de idolatría.
ESCLAVOS DE
LOS ÍDOLOS Y DEL PECADO Y LIBERADOS DE TODA IDOLATRÍA.
“Más ahora
que habéis sido libertados del pecado y hechos siervos de Dios, tenéis por
vuestro fruto la santificación, y como fin, la vida eterna”- (Romanos 6:22).
SAÚL
ERA UN IDÓLATRA, UN REBELDE Y UN
DESOBEDIENTE.
En primera
de Samuel 15, leemos la historia de cómo Saúl fracasó en destruir los animales
que Dios había ordenado fueran aniquilados. Samuel confrontó a Saúl sobre este
asunto, y Saúl mintió diciendo que sacrificaría a los animales, pero nunca lo
hizo. Y Samuel le dijo: “¿Se complace Jehová tanto en los holocaustos y víctimas,
como en que se obedezca a las palabras de Jehová? Ciertamente el obedecer es
mejor que los sacrificios, y el prestar atención que la grosura de los
carneros. Porque como pecado de adivinación es la rebelión, y como ídolos e
idolatría la obstinación” (1 Sam.15:22,23ª).
COMO ÍDOLOS E IDOLATRÍA ES LA OBSTINACIÓN.
El rebelarse
contra Dios es como el pecado de hechicería porque lo pone a usted en los
dominios del diablo. Cuando Dios da un claro mandamiento en su Palabra, no
debemos hacerlo pasar por el filtro juzgador de nuestro humano entendimiento.
Debemos obedecerlo sea que lo entendamos o no, sea que estemos de acuerdo o no.
O es la Palabra de Dios que debe obedecer o no lo es.
ES NECESARIO
PEDIR LA SABIDURÍA DE DIOS PARA ACTUAR CORRECTAMENTE.
¿Hay alguna
verdad en la Palabra de Dios que no entiende? Pídale a Él que le dé
entendimiento. ¿Hay alguna verdad a la cual usted no se ha rendido en
obediencia? Pida que Dios le perdone, y que le derrita y le moldee como su
siervo, para su gloria.
UNA
IDOLATRÍA QUE QUIERE DESPLAZAR A DIOS:
LA RIQUEZA, EL PODER, LA AUTOSUFICIENCIA, EL ORGULLO, LA AVARICIA.
La ruina de
Moab es predicha; Siria (Aram) e Israel son amenazados; los juicios de Dios;
Egipto vendrá a adorar al Señor; el cautiverio de Egipto predicho
El profeta
Isaías fue guiado a poner a un lado sus pensamientos del glorioso reino futuro
del Rey de Paz y empezar a proclamar el juicio de Dios sobre los incrédulos.
Primeramente, el juicio fue proclamado sobre el reino idólatra del norte,
diciendo: «Y cesará el socorro de Efraín . . . ». Entonces él incluyó también a
Judá, y dijo: «En aquel tiempo la gloria de Jacob se atenuará . . . y habrá
desolación. Porque te olvidaste del Dios de tu salvación» (Isaías 17:3-4,9-10).
«(El)
socorro de Efraín» (su ayuda o fortaleza) se refiere al reino de las diez
tribus del norte, un símbolo de riqueza, poder, y gloria personal, lo cual
sería destruido cruelmente por Asiria. Quizás fue muy extraño que él profetizó
que Judá, «la gloria de Jacob», se iba a desaparecer, un recordatorio de que el
reino de Judá y la santa ciudad de Dios iba a ser finalmente destruida porque
ellos también se habían involucrado en buscar las cosas del mundo y
gradualmente habían olvidado la Palabra de Dios. Enfocamos nuestra atención en
la futilidad de depender en las posesiones de este mundo para obtener
seguridad, pues el rey David nos amonesta: « . . . Si se aumentan las riquezas,
no pongáis el corazón en ellas» (Salmo 62:10).
TESOROS EN
LA TIERRA, QUE DEBILITAN NUESTRA FE EN JESUCRISTO.
Nada esconde
la voluntad de Dios de la vista del hombre con tanto engaño como el éxito y el
orgullo que anima a la autosuficiencia. Quizás fue por esa razón que nuestro
Salvador dijo: «No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín
corrompen, y donde ladrones minan y hurtan. . . » (Mateo 6:19). Las riquezas
pueden debilitar la fe, tal y como Santiago nos indica, diciendo: «Hermanos
míos amados, oíd: ¿No ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean
ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman?»
(Santiago 2:5). Las riquezas también nos llevan a perseguir sin fin más y más
«cosas». Esto, a la vez, muchas veces termina en la avaricia, que es también
idolatría (Colosenses 3:5).
UNA AVARICIA
QUE NOS LLEVA A LA ALTIVEZ.
Nuestro
Señor Jesús nos advierte: «Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida
del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee» (Lucas 12:15).
El Señor mismo tiene el poder para hablarnos a cada uno personalmente y
decirnos cómo es que Él quiere que pasemos el tiempo transformando las vidas de
otras personas y cómo cumplir con Su gran comisión. El apóstol Pablo le
escribió a Timoteo: «A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni
pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios
Vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos» (I de
Timoteo 6:17; Deuteronomio 8:18).
UNA
ADORACIÓN Y ALABANZA PERFECTA A DIOS, DANDO GRACIAS.
“Te alabaré,
oh Jehová Dios mío, con todo mi corazón, y glorificaré tu nombre para siempre”
(Salmos 86:12).
¿Qué es lo
que le proporciona gozo hoy? Usted dirá: “El Señor me hace feliz.” Bueno, pero
¿cómo sabe usted que no es el bonito carro que tiene? ¿O su novia o novio? ¿O
su buena apariencia física? ¿O su cuenta bancaria? ¿O su popularidad?
¿EN DÓNDE
ESTÁN PUESTOS SUS OJOS?
Le diremos
cómo puede saberlo: por el proceso de eliminación. Si Dios le quitara su salud,
su hogar, su trabajo, y aun así usted tiene gozo, entonces sabe que es Jesús.
Si usted pierde el gozo cuando pierde cualquiera de las cosas mencionadas,
usted es un idólatra porque de ahí es de donde obtiene su gozo. No queremos
decir que no esté temporalmente triste y disgustado cuando pierde algunas de
esas cosas, pero si el gozo desaparece de su vida, usted no estaba obteniendo
su gozo del Señor. Usted nunca sabrá que Jesús es todo lo que necesita, hasta
que Jesús sea todo lo que tiene.
Es tiempo de
chequear su corazón: ¿en verdad ama a Dios con todo su corazón? Vuelva a
dedicar su vida a Él, hoy. Rinda cada milímetro de quién es usted y de lo que
tiene, a Él. Si es necesario, pídale perdón por haber cometido idolatría.
LOS MEJORES
TESOROS ESTÁN EN EL CIELO, EN LA TIERRA ESOS TESOROS DESVÍAN NUESTRO CORAZÓN A
OTROS dioses, A LA IDOLATRÍA.
“haceos
tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones
no minan ni hurtan”. - Mt. 6:20
Jason Bohn
era estudiante universitario cuando convirtió un hoyo en un solo golpe jugando
al golf y ganó un millón de dólares. Aunque otros podrían haber despilfarrado
ese dinero, Bohn tenía un plan. Como deseaba ser profesional de ese deporte,
usó el premio como un fondo para vivir y entrenarse, y mejorar su talento
deportivo. El efectivo se convirtió en una inversión para su futuro, la cual le
dio sus dividendos cuando ganó el torneo B. C. Open de 2005 de la PGA
(Asociación de Golf Profesional). Sin duda, su decisión de invertir a largo
plazo en vez de vivir el momento fue sabia.
En un
sentido, esto es lo que Jesús nos dice que hagamos. Se nos han confiado
recursos (tiempo, talento, oportunidades) y nosotros decidimos cómo usarlos. El
desafío es considerar esos recursos como utilidades para invertir a largo
plazo. El Señor lo expresa de este modo en Mateo 6:20: «… haceos tesoros en el
cielo», y nos asegura que estos tesoros protegidos no pueden ser destruidos ni
robados.
Piensa en
tus recursos: talento, tiempo, conocimiento, capacidades, profesión, negocio,
dinero. Son temporales y limitados. Pero si los inviertes con la vista puesta
en la eternidad, estas cosas efímeras pueden producir un impacto permanente.
¿Cuál es tu objetivo? ¿El ahora o la eternidad? Invierte en el futuro, ya que
no solo tendrá un efecto interminable, sino que también cambiará tu manera de
ver la vida cada día.
Reflexión:
Las personas más ricas de la tierra son las que invierten su vida en el cielo.
Proverbios
7:24: “Ahora pues, hijos, oídme, y estad atentos a las razones de mi boca.”
El Gobierno
de los Estados Unidos no les enseña a los agentes del Ministerio de Hacienda a
detectar billetes falsos mediante el estudio cuidadoso de billetes
falsificados. Al contrario, les muestran una y otra vez los billetes genuinos
hasta que se memoricen el diseño. Entonces, cuando un billete falsificado es
colocado delante de ellos, lo reconocen inmediatamente porque no está de
acuerdo con el diseño que sus ojos buscan.
¿Conoce
usted la voz del Señor? La única manera que usted puede saber si la voz que
escucha es la de Dios, es escucharla tan frecuentemente de modo que cuando
escuche una voz extraña la pueda reconocer instantáneamente. Es mil veces más
sabio dedicar tiempo para aprender la única voz verdadera que tratar de
aprender a detectar una multitud de voces falsas.
Dedique por
lo menos 15 minutos de su tiempo hoy para tener un momento a solas con Dios y
poder así escuchar su voz.
Mateo 1:21:
“Y dará a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS, porque Él salvará a su
pueblo de sus pecados.”
¿Somos los
creyentes ingenuos por creer en Jesús? ¿Estamos sirviendo a un Dios falso? Si
usted va a la tumba de Confucio, encontrará que está ocupada. Si va a la tumba
de Buda, encontrará que está ocupada. Si va a la tumba de Jesús, usted la
encontrará vacía. Él es un Salvador resucitado. Eso es importantísimo, porque
usted puede sacar a Confucio del confucionismo y aún tener el confucionismo.
Puede sacar a Buda del budismo y todavía tener el budismo. Pero usted no puede
sacar a Jesucristo del cristianismo y aún tener el cristianismo, porque el
cristianismo no es un código, no es un credo, no es una causa. Es el mismo
Cristo.
Usted tiene
una esperanza que el mundo necesita escuchar. ¿Con quién puede compartir esa
esperanza hoy?
LA BIBLIA
NOS HABLA CON MUCHA CLARIDAD ACERCA DE LA IDOLATRÍA:
1. Éxodo 20:
1-5. 1 Y habló Dios todas estas palabras, diciendo:
20:2 Yo soy
Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa de servidumbre.
20:3 No
tendrás dioses ajenos delante de mí.
20:4 No te
harás imagen, ni ninguna semejanza de lo que esté arriba en el cielo, ni abajo
en la tierra, ni en las aguas debajo de la tierra.
20:5 No te
inclinarás a ellas, ni las honrarás; porque yo soy Jehová tu Dios, fuerte,
celoso, que visito la maldad de los padres sobre los hijos hasta la tercera y
cuarta generación de los que me aborrecen,
2. Salmo
135: 15- 16. Los ídolos de las naciones son plata y oro,
Obra de
manos de hombres.
135:16
Tienen boca, y no hablan;
Tienen ojos,
y no ven;
135:17
Tienen orejas, y no oyen;
Tampoco hay
aliento en sus bocas.
135:18
Semejantes a ellos son los que los hacen,
Y todos los
que en ellos confían.
Jeremías 10:
1- 15. Oíd la palabra que Jehová ha hablado sobre vosotros, oh casa de Israel.
10:2 Así
dijo Jehová: No aprendáis el camino de las naciones, ni de las señales del
cielo tengáis temor, aunque las naciones las teman.
10:3 Porque
las costumbres de los pueblos son vanidad; porque leño del bosque cortaron,
obra de manos de artífice con buril.
10:4 Con
plata y oro lo adornan; con clavos y martillo lo afirman para que no se mueva.
10:5
Derechos están como palmera, y no hablan; son llevados, porque no pueden andar.
No tengáis temor de ellos, porque ni pueden hacer mal, ni para hacer bien
tienen poder.
10:6 No hay
semejante a ti, oh Jehová; grande eres tú, y grande tu nombre en poderío.
10:7 ¿Quién
no te temerá, oh Rey de las naciones? Porque a ti es debido el temor; porque
entre todos los sabios de las naciones y en todos sus reinos, no hay semejante
a ti.
10:8 Todos
se infatuarán y entontecerán. Enseñanza de vanidades es el leño.
10:9 Traerán
plata batida de Tarsis y oro de Ufaz, obra del artífice, y de manos del
fundidor; los vestirán de azul y de púrpura, obra de peritos es todo.
10:10 Mas
Jehová es el Dios verdadero; él es Dios vivo y Rey eterno; a su ira tiembla la
tierra, y las naciones no pueden sufrir su indignación.
10:11 Les
diréis así: Los dioses que no hicieron los cielos ni la tierra, desaparezcan de
la tierra y de debajo de los cielos.
10:12 El que
hizo la tierra con su poder, el que puso en orden el mundo con su saber, y
extendió los cielos con su sabiduría;
10:13 a su
voz se produce muchedumbre de aguas en el cielo, y hace subir las nubes de lo
postrero de la tierra; hace los relámpagos con la lluvia, y saca el viento de
sus depósitos.
10:14 Todo
hombre se embrutece, y le falta ciencia; se avergüenza de su ídolo todo
fundidor, porque mentirosa es su obra de fundición, y no hay espíritu en ella.
10:15
Vanidad son, obra vana; al tiempo de su castigo perecerán.
Ezequiel 20:
39 Y a vosotros, oh casa de Israel, así
ha dicho Jehová el Señor: Andad cada uno tras sus ídolos, y servidles, si es
que a mí no me obedecéis; pero no profanéis más mi santo nombre con vuestras
ofrendas y con vuestros ídolos.
Oseas 8: 1-
14 Pon a tu boca trompeta. Como águila viene contra la casa de Jehová, porque
traspasaron mi pacto, y se rebelaron contra mi ley.
8:2 A mí
clamará Israel: Dios mío, te hemos conocido.
8:3 Israel
desechó el bien; enemigo lo perseguirá.
8:4 Ellos
establecieron reyes, pero no escogidos por mí; constituyeron príncipes, más yo
no lo supe; de su plata y de su oro hicieron ídolos para sí, para ser ellos
mismos destruidos.
8:5 Tu
becerro, oh Samaria, te hizo alejarte; se encendió mi enojo contra ellos, hasta
que no pudieron alcanzar purificación.
8:6 Porque
de Israel es también éste, y artífice lo hizo; no es Dios; por lo que será
deshecho en pedazos el becerro de Samaria.
8:7 Porque
sembraron viento, y torbellino segarán; no tendrán mies, ni su espiga hará
harina; y si la hiciere, extraños la comerán.
8:8 Devorado
será Israel; pronto será entre las naciones como vasija que no se estima.
8:9 Porque
ellos subieron a Asiria, como asno montés para sí solo; Efraín con salario
alquiló amantes.
8:10 Aunque
alquilen entre las naciones, ahora las juntaré, y serán afligidos un poco de
tiempo por la carga del rey y de los príncipes.
8:11 Porque
multiplicó Efraín altares para pecar, tuvo altares para pecar.
8:12 Le
escribí las grandezas de mi ley, y fueron tenidas por cosa extraña.
8:13 En los
sacrificios de mis ofrendas sacrificaron carne, y comieron; no los quiso
Jehová; ahora se acordará de su iniquidad, y castigará su pecado; ellos
volverán a Egipto.
8:14 Olvidó,
pues, Israel a su Hacedor, y edificó templos, y Judá multiplicó ciudades
fortificadas; mas yo meteré fuego en sus ciudades, el cual consumirá sus
palacios.
Isaías 44:
6- 20 Así dice Jehová Rey de Israel, y su Redentor, Jehová de los ejércitos: Yo
soy el primero, y yo soy el postrero, y fuera de mí no hay Dios.
44:7 ¿Y
quién proclamará lo venidero, lo declarará, y lo pondrá en orden delante de mí,
como hago yo desde que establecí el pueblo antiguo? Anúncienles lo que viene, y
lo que está por venir.
44:8 No
temáis, ni os amedrentéis; ¿no te lo hice oír desde la antigüedad, y te lo
dije? Luego vosotros sois mis testigos. No hay Dios sino yo. No hay Fuerte; no
conozco ninguno.
44:9 Los
formadores de imágenes de talla, todos ellos son vanidad, y lo más precioso de
ellos para nada es útil; y ellos mismos son testigos para su confusión, de que
los ídolos no ven ni entienden.
44:10 ¿Quién
formó un dios, o quién fundió una imagen que para nada es de provecho?
44:11 He
aquí que todos los suyos serán avergonzados, porque los artífices mismos son
hombres. Todos ellos se juntarán, se presentarán, se asombrarán, y serán
avergonzados a una.
44:12 El
herrero toma la tenaza, trabaja en las ascuas, le da forma con los martillos, y
trabaja en ello con la fuerza de su brazo; luego tiene hambre, y le faltan las
fuerzas; no bebe agua, y se desmaya.
44:13 El
carpintero tiende la regla, lo señala con almagre, lo labra con los cepillos,
le da figura con el compás, lo hace en forma de varón, a semejanza de hombre
hermoso, para tenerlo en casa.
44:14 Corta
cedros, y toma ciprés y encina, que crecen entre los árboles del bosque; planta
pino, que se críe con la lluvia.
44:15 De él
se sirve luego el hombre para quemar, y toma de ellos para calentarse; enciende
también el horno, y cuece panes; hace además un dios, y lo adora; fabrica un
ídolo, y se arrodilla delante de él.
44:16 Parte
del leño quema en el fuego; con parte de él come carne, prepara un asado, y se
sacia; después se calienta, y dice: ¡Oh! me he calentado, he visto el fuego;
44:17 y hace
del sobrante un dios, un ídolo suyo; se postra delante de él, lo adora, y le
ruega diciendo: Líbrame, porque mi Dios eres tú.
44:18 No
saben ni entienden; porque cerrados están sus ojos para no ver, y su corazón
para no entender.
44:19 No
discurre para consigo, no tiene sentido ni entendimiento para decir: Parte de
esto quemé en el fuego, y sobre sus brasas cocí pan, asé carne, y la comí.
¿Haré del resto de él una abominación? ¿Me postraré delante de un tronco de
árbol?
44:20 De
ceniza se alimenta; su corazón engañado le desvía, para que no libre su alma,
ni diga: ¿No es pura mentira lo que tengo en mi mano derecha?
Isaías 45:
1- 25 Así dice Jehová a su ungido, a Ciro, al cual tomé yo por su mano derecha,
para sujetar naciones delante de él y desatar lomos de reyes; para abrir
delante de él puertas, y las puertas no se cerrarán:
45:2 Yo iré delante
de ti, y enderezaré los lugares torcidos; quebrantaré puertas de bronce, y
cerrojos de hierro haré pedazos;
45:3 y te
daré los tesoros escondidos, y los secretos muy guardados, para que sepas que
yo soy Jehová, el Dios de Israel, que te pongo nombre.
45:4 Por
amor de mi siervo Jacob, y de Israel mi escogido, te llamé por tu nombre; te
puse sobrenombre, aunque no me conociste.
45:5 Yo soy
Jehová, y ninguno más hay; no hay Dios fuera de mí. Yo te ceñiré, aunque tú no
me conociste,
45:6 para
que se sepa desde el nacimiento del sol, y hasta donde se pone, que no hay más
que yo; yo Jehová, y ninguno más que yo,
45:7 que
formo la luz y creo las tinieblas, que hago la paz y creo la adversidad. Yo
Jehová soy el que hago todo esto.
45:8 Rociad,
cielos, de arriba, y las nubes destilen la justicia; ábrase la tierra, y
prodúzcanse la salvación y la justicia; háganse brotar juntamente. Yo Jehová lo
he creado.
45:9 ¡Ay del
que pleitea con su Hacedor! ¡el tiesto con los tiestos de la tierra! ¿Dirá el
barro al que lo labra: ¿Qué haces?; o tu obra: No tiene manos?
45:10 ¡Ay
del que dice al padre: ¿Por qué engendraste? y a la mujer: ¿Por qué diste a
luz?!
45:11 Así
dice Jehová, el Santo de Israel, y su Formador: Preguntadme de las cosas por
venir; mandadme acerca de mis hijos, y acerca de la obra de mis manos.
45:14 Así
dice Jehová: El trabajo de Egipto, las mercaderías de Etiopía, y los sabeos,
hombres de elevada estatura, se pasarán a ti y serán tuyos; irán en pos de ti,
pasarán con grillos; te harán reverencia y te suplicarán diciendo: Ciertamente
en ti está Dios, y no hay otro fuera de Dios.
45:15
Verdaderamente tú eres Dios que te encubres, Dios de Israel, que salvas.
45:16
Confusos y avergonzados serán todos ellos; irán con afrenta todos los
fabricadores de imágenes.
45:17 Israel
será salvo en Jehová con salvación eterna; no os avergonzaréis ni os
afrentaréis, por todos los siglos.
45:18 Porque
así dijo Jehová, que creó los cielos; él es Dios, el que formó la tierra, el
que la hizo y la compuso; no la creó en vano, para que fuese habitada la creó:
Yo soy Jehová, y no hay otro.
45:19 No
hablé en secreto, en un lugar oscuro de la tierra; no dije a la descendencia de
Jacob: En vano me buscáis. Yo soy Jehová que hablo justicia, que anuncio
rectitud.
45:20
Reuníos, y venid; juntaos todos los sobrevivientes de entre las naciones. No
tienen conocimiento aquellos que erigen el madero de su ídolo, y los que ruegan
a un dios que no salva.
45:21
Proclamad, y hacedlos acercarse, y entren todos en consulta; ¿quién hizo oír
esto desde el principio, y lo tiene dicho desde entonces, sino yo Jehová? Y no
hay más Dios que yo; Dios justo y Salvador; ningún otro fuera de mí.
45:22 Mirad
a mí, y sed salvos, todos los términos de la tierra, porque yo soy Dios, y no
hay más.
45:23 Por mí
mismo hice juramento, de mi boca salió palabra en justicia, y no será revocada:
Que a mí se doblará toda rodilla, y jurará toda lengua.
1 Corintios
10: 14 Por tanto, amados míos, huid de la idolatría.
1 Tesalienses
1: 9- 10 porque ellos mismos cuentan de nosotros la manera en que nos
recibisteis, y cómo os convertisteis de los ídolos a Dios, para servir al Dios
vivo y verdadero,
1:10 y esperar
de los cielos a su Hijo, al cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos
libra de la ira venidera.
1ra de Pedro
4: 3 Baste ya el tiempo pasado para haber hecho lo que agrada a los gentiles,
andando en lascivias, concupiscencias, embriagueces, orgías, disipación y
abominables idolatrías.
Hechos 17:
22- 27Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones
atenienses, en todo observo que sois muy religiosos;
17:23 porque
pasando y mirando vuestros santuarios, hallé también un altar en el cual estaba
esta inscripción: AL DIOS NO CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin
conocerle, es a quien yo os anuncio.
17:24 El
Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo Señor del cielo
y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas,
17:25 ni es
honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien da a
todos vida y aliento y todas las cosas.
17:26 Y de
una sangre ha hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda
la faz de la tierra; y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites
de su habitación;
17:27 para
que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque
ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros.